No solo de Carbonero vive el hombre. Los comentaristas deportivos son, en ocasiones, un filón que nada envidia la manchega. Conocer la fórmula de la Coca Cola o entender los grandes misterios, como el TAE o el “metro útil”: todo es posible cuando se hablan los maestros.
1. Un gol daría mucha tranquilidad al equipo. Gracias por aclararnos algo que nunca se nos hubiese ocurrido.
2. Si pasamos del 1-0 a un empate a 1, hablamos de un escenario completamente diferente. Claro, no es igual ganar que empatar, ni estar vivo que estar muerto.
3. Que nos metan un gol no sería nada bueno. Por favor, que se lo repitan bien alto al portero, que a lo mejor él cree que sí y les deja marcar.
4. Para meter un gol antes hay que crear ocasiones. Y para que se te pase el hambre antes hay que comer.
5. Ahora es un buen momento para marcar un gol. Ah… pero ¿alguno no lo es?
6. Le ha hecho perder la verticalidad. No se puede perder algo que no se tuvo, salvo que el jugador sea una figura geométrica o una organización jerarquizada.
7. Para un delantero es importante meter goles. Yo pensaba que estaban ahí para repasar las rayas blancas del área cuando se pisan.
8. El juego es importante, pero lo que decide al ganador son los goles. Más goles: ganaaaaar. Menos: perdeeeeeer. Igual: empataaaaar. Para que luego digan que desde Barrio Sésamo la tele no es educativa.
9. Si el rival nos empata, se mete en el partido. Si la diferencia es de ocho goles, se mete un Valium.
10. Mucho cuidado con las lesiones. Como romperte la rodilla es algo que casi no duele, hay que recordar a los jugadores que no se dejen pulverizar la rótula.
